lunes, 23 de julio de 2007

Ser buen ciudadano: se nace o se hace?


Ésta semana, quiero dejaros con una frase que leí en un libro que utilizaba para preparar la
asignatura de "Europa Napoleónica" en la universidad.

La frase es de Cambacérès (jurista en los tiempos de la Francia de Napoleón):
"sólo las virtudes domésticas garantizan las cívicas; a través de la pequeña patria que es la familia, queda uno asociado a la más grande; los buenos padres, los buenos maridos (y esposas), y los buenos hijos, hacen los buenos ciudadanos".

Otra semana más, vuelvo a poner en tela de juicio otra temática diferente, y en concreto hoy, publico la opinión de este personaje, el cual creía que para tener la garantía de un día llegar a ser un buen ciudadano, se tenía que tener una base de valores dados por la familia de origen.

Estáis de acuerdo con esta afirmación? Qué opináis al respecto?

Gracias por leerme esta semana,
Tony

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo creo que este tema en concreto es demasiado relativo, un chico o una chica puede tener una buena educación y ser un rebelde y hacer todo lo contrario a lo que le han enseñado, de hecho, creo que influye demasiado la interactuación entre ellos en edades tempranas como en los inicios de la pubertad, tod@s la hemos pasado y sabemos que por norma general, por tratar de seguir un criterio propio y sentirnos mayores, pasábamos bastante de lo que nos dijeran los padres (siempre han habido excepciones,claro), pero es por ejemplo como el chaval que está en la plaza con los amigotes y no hace más que escupir en el suelo... no es en absoluto cívico, pero eso, quien se lo ha enseñado? o el/la que come pipas y las deja tiradas encima de un banco, o el/la que tira algo al suelo de la calle habiendo una papelera al lado... todas son conductas incívicas pero que difícilmente han podido ser transmitidas de padres a hijos por norma general, que también es cierto que hay mucho guarro.
Otro tema es las actitudes incívicas para con nuestros vecinos, que eso ya es para mí mas debatible, pues nuestra actitud con nuestros vecinos está más influenciada por lo que hemos vivido en casa que no lo que hayamos experimentado fuera. Y la verdad es bastante triste que gente supuestamente con una educación, y una cultura no tenga otra cosa que hacer que estar pendiente de tocarle las pelotas al vecino, o cuando se aburre ir a la comisaria y presentar una denuncia por cualquier motivo...
Yo antes trabajaba en un taller que era un bajos comercial en un edificio de nueva construcción de dos plantas... pues era increible lo desgraciados, rasteros y miserables que llegaron a ser los dichosos vecinos (y una de las mujeres habia sido profesora mia y de mi hermano cuando íbamo a la EGB, por lo que ésta, una cultura por narices, ha recibido)
Me da la sensación que la sociedad está un poco despistada, que sabe que alguien le está atacando, y parece ser que al verse impotente de devolver la jugada, la paga con quien no tiene la culpa.

Abel

Anónimo dijo...

Mmmm, tema interesante. Sobre todo desde el anuncio por parte del Ministerio de Educación de la instauración de la famosa asignatura de educación cívica en los colegios públicos. ¿Es ese el lugar? ¿Es esa la forma?
Hace no mucho tiempo volví a mi instituto y tuve la oportunidad de dar una vuelta y tomar un café con los profesores. Está situado en un barrio con bastante delincuencia y, además de profesores, cuenta con personas que se dedican a ayudar a los alumnos con problemas de conducta, son gente muy especial que pone mucho esfuerzo y dedicación en esos chicos. Es cierto que se dedican aparentemente a hacer que su conducta sea más cívica (que no insulten, agredan, roben, se salten las clases...)pero hacen mucho más que eso en realidad: les escuchan e intentan comprender porqué hacen lo que hacen. Me parece que es allí dónde realmente empieza la educación cívica. Y no creo que eso se pueda conseguir con una asignatura en el plan de estudios.
El problema de que cada uno en esta sociedad vaya a su bola (la falta de civismo no es sino la falta de consciencia de la existencia del resto de seres humanos a parte de uno mismo) no es un problema superficial y, por lo tanto, no tiene una solución superficial.
Ojalá algún día todos tengamos a los demás en tan alta estima como nos tenemos a nosotros mismos y seamos capaces de renunciar a nuestros caprichos por el bien de otra persona a la que ni siquiera conocemos. Pero, ¿está en el hombre el conseguir eso?
Algunos nacen, pero a todos nos es necesario que nos hagan.

Anónimo dijo...

Suposo que la majoria del teus lectors viuen a Catalunya, així que escric en català, perquè no sigui ple d'errors.

Evidentment ajuda tenir una bona família, però tots coneixem persones bones que no han tingut precisament una bona família.

Però això ens porta a demanar, què és la nostra família? Crec que si interpretem que en aquesta citació no es refereix exclusivament als parents consanguinis, sí que té més sentit. Per exemple, a la bíblia Pau en deia de Timoteu el seu "veritable fill en la fe", i Pau va tenir al menys tanta influència sobre la seva vida que els seu propis pares. També podria donar exemples contemporanis de persones que han tingut el paper de pares de persones que no són els seus propis fills.

Ara, aquesta importància de tenir bones persones que ens influeixen no treu que cadascú decidim seguir el camí que volem. Per això em sap molt de greu que els pares de Rhys Jones, el noi de 11 anys assassinat la setmana passada a Liverpool, hagin dit que consideren que en tenen la culpa els pares de l'assassí. Perquè no sabem res de les circumstàncies.

Samuel dijo...

Por desgracia, la mayoría tenemos cerebro y, por algun complicado sistema que Dios inventó, esa masa, que algunos consideran un alimento cuando está dentro de las vacas, se llenó de inteligencia. Y lamentablemente eso nos da capacidad de decidir que camino tomamos.

Si tenemos una familia asentada sobre mierda, nos costará más quitarnos el olor, pero los que oleremos, al fin y al cabo, somos nosotros. ¿Quieres seguir oliendo o tomarte una ducha?

Hasta aquí mi reflexión. Lavarse es una decisión personal. Seguid con salud.

Anónimo dijo...

El público pide actualizaciones ;)
(Abel)